lunes, 1 de mayo de 2017

La primera huelga de Honduras y Centroamerica

Por Lic. Hector Ramón Cortés C.

Ilustración del Mineral de Yuscarán, año 1887
La historia de movimiento obrero en Honduras, nos sigue arrojando muy interesantes datos, hitos históricos que narran el devenir de nuestra clase obrera. De algunos es conocida la huelga realizada en el mineral de San Juancito el 10 de marzo de 1909,  dato que algunos erróneamente catalogaron como la primera huelga de Honduras.

Al escudriñar los anales del Archivo Nacional de Honduras nos encontramos que el primer movimiento huelguístico que propicio la clase trabajadora de Honduras se verifico el 5 de febrero de 1871 en el entonces Real de Minas de San José de Yuscarán.  Movimiento motivado por los malos salarios, el rechazo a los pagos en moneda de níquel y la urgente determinación de un mejor salario mínimo.
Cerca de seiscientos mineros que trabajaban en las antiguas minas de Guayabillas, Capiro, La Esperanza, El Platero, San Juan, Mina Grande, Monserrat, Quemazones, Comunidad, Santa Elena y otras más, obreros  que trabajan en ocho ingenios y también en transportes de minerales;  y en distintos grupos exaltados fueron los incitadores de tal hazaña.

Basilio Salinas tomo el liderazgo entre los mineros y se puso al frente de los más gritones y les preguntó:  - ¿En honor de qué tanta Ira?, a lo que los exaltados contestaron con dichos muy peculiares de esa época y especialmente una forma muy particular de expresarse de Basilio Salinas.

"Olla que mucho hierve sabor pierde", le contesto Salvador el hijo de la Zarca: "Olla que hierve ninguna mosca se atreve" - Pero hijo, contesto Salinas - "Oveja que bala bocado pierde":  Si la barriga es la que da ingenio, debes tenerle bien llena para dirigir las multitudes, sino queres ser devorado por hambrientos".
“Hay águila, debajo esta roca": Comentaban varios mineros, - Nombrémoslo nuestro representante para defender qué causa Tribuno de la plebe?

- La de los mineros que no se les paga su jornal con buena moneda, soberbio patricio. Basilio replico - Bien haya, quien a los suyos se parece: Por la necesidad del momento acepto la representación....
Actos seguido y  en hombros fue llevado Basilio, frente al señor Alcalde 1ro. don Jorge Collier, gamonales y hombres de negocio, reunidos en el cabildo Municipal. Y se dio inicio a la audiencia, previo al saludo de Basilio en esta forma:

Me permiten señores hablar en nombre de los mineros? - Desde luego Basilio le responde el señor Alcalde; pues es más fácil entenderse con uno, que con cientos...

- Diga usted señor Alcalde, es más fácil entenderse con un padre para cien hijos, y no cien hijos para un padre.
- Bien.... ¿Qué es lo que pretenden los huelguistas?

Los trabajadores en las minas quieren los pagos recibidos en cambio de sus faenas se les cuente en dinero porque el obrero trabaja para comprar maíz, frijoles, carne, vestidos, aguardiente, tabaco y otros artículos de consumo, compras que las hacen en su salario real; y si puede ahorrar, mucho mejor.
Debemos señores, hacernos mutuas concesiones, porque el capital sin trabajo, es un taburete sin patas, que no sirve para sentarse: una mano lava a la otra, y ambas la cara: los ricos necesitan de los pobres y estos de aquellos, por lo que debemos vivir en inteligencia reciproca y en fraternal unión... !Bravo Basilio, por las uñas se descubre al león, gritó el negro Meráz. - Todavía queda algo que espigar, respondió este  por el elogio.

-En Efecto, dijo un comerciante, los empresarios de minas han venido pagando los salarios en moneda de níquel; ¿por qué no se sigue del mismo modo?

-Usted es comerciante y sabe que lo que se da, iguala en valor a lo que se recibe: Me daría una pieza de manta por un zurrón lleno de monedas de níquel? Desde luego que no. Porque qué, pues, quiere que el níquel que no tiene ni valor curativo, como medicina, lo reciba en cambio un jornalero por sus ocho o nueve horas de trabajo que da el patrón? El Níquel se halla en tal abundancia, como la mala yerba en los campos, con eso es que murió al nacer.

-Pero en la actualidad pagamos los salarios en moneda de cobre, dijo el empresario de minas don Luciano Carías, que es moneda legal.

- Para el mal que hoy acaba no es remedio el de mañana: El cobre don Luciano, es Rey destronado, que aunque fue consagrado, no tiene prestigio ni entre sus cortesanos de ayer; y aunque se aferre por empuñar el cetro, no volverá a su anterior ascendente; y no consiste en que sea legal, que también lo es el níquel, sino que sea de curso corriente, es decir escogido para circular entre todos, como medio de cambio; y el cobre no solo es porque con 25 previsionales, que ha sido hasta ahora, el jornal de un día de trabajo de un operario, no se puede comprar éste, más que una candela de sebo....
¿Cuántos jornales necesitará para comer un día con su mujer y sus hijos? El cobre ha sido destronado por la plata, esa niña mimada que tenéis aprisionada como pájaro del dulce encanto: Esa moneda no cambia rápidamente, porque su materia prima dura mucho tiempo con su valor aproximado a su peso. El cobre puede ser que sea de nuevo aceptado para pequeñas compras....

Si les damos ahora plata, mañana querrán oro: lo que es bueno para el hígado es malo para el bazo: Engañosos sueños de enfermo, dice César, apodado "Conde de Ventolera", que tiene sus reservas de plata.
- Mientras el enfermo tiene vida, duran las esperanzas, decía Cicerón que de los pies a la cabeza, estaba acuñado con buen tropel...
-Es otro tanto oro, con esa tu palabra perla, Basilio exclamó el Mayordomo Clemente Chamuscado.
- Gracias Clemente: Es de morirse por tus pedazos; pero permítame que quiero poner la ceniza en la frente a los patrones, para que abran sus cajas y dejen salir la plata, que estamos deseosos de oír su argentino sonido en las humildes casas de los güirises. Tened presente señores que el operario de minas trabaja con igual peligro que el buceador de las profundidades del mar donde puede encontrar su tumba, como el infeliz minero en las entrañas de la tierra; por lo que tienen derecho a recibir mejor salario, ya que también vosotros queréis tener mejores utilidades: El Operario mejor alimentado está en buenas condiciones de prestar todas sus energías y vosotros no sólo recibiréis trabajo más eficiente, sino las bendiciones de todas las madres, esposas e hijos que por vuestro medio les envía Dios el pan de cada día.

- Se mejorarán los jornales en una cuarta parte y se pagaran en moneda de plata, dijeron los más pudientes empresarios de minas... Amén, gritó Antonio El Mecino: El llanto sobre el difunto; y el pueblo loco de contento gritaba: !Viva Basilio Salinas! !Vivan los patrones! Terminando asi el primer movimiento huelgistico del movimiento obrero de Honduras

Basilio Salinas Ardón: Primer líder del movimiento obrero de Honduras

Firma de Basilio Salinas, primer líder obrero de Honduras
Pero se preguntara el lector ¿Quién es este Basilio Salinas? Basilio, me decía en sabrosa plática don Sebastián Varela Vásquez, hombre honrado y veraz, pariente inmediato del General Domingo Vásquez y de don Manuel Emigdio del mismo apellido, que Basilio fue hijo legitimo de Albino Salinas y Ana Ardón, no sabía leer; pero pudo agenciarse libros de clásicos y leyes vigentes que se hacía leer, pues tenía buena memoria y es así como llevaba pleitos que le proporcionaban el vivir y respetabilidad como litigante, el mismo señor Vásquez fue testigo presencial, de esta huelga y pudo conversar en su memoria los adagios, refranes y proverbios que gastaba en defensa de sus representados. En la cabeza de este mi viejo amigo, se guardaban indelebles Don Basilio Salinas Ardón nació en Yuscarán el 15 de abril de 1822, sus padres fueron Albino Salinas y Ana Ardón. Su padrino fue Juan Nepomuceno Morazán, hermano del papá de Eusebio Morazán, padre del General Francisco Morazán Quezada. Procreó 6 hijos con María Trinidad Irías los que detallamos a continuación: Teresa de Jesús, nació el 3 de junio de 1857, fue su madrina Mercedes Andará. Indalecio, nació el 25 de mayo de 1862, su padrino fue Basilio Torres. Ángel José nació el 30 de julio de 1865, su padrino también fue Basilio Torres.  Antonio Salinas nació el 10 de junio de 1868 siendo su padrino don Alejandro Urrutia. Basilio que nació el 16 de abril de 1871 siendo su padrino Esteban Ardón  y Gilberto nacido el 7 de julio de 1873 siendo su padrino don Alejandro Urrutia.


Don Jorge Collier

Mineros Jorge y Pantaleón Collier
Migrante irlandés Jorge Collier, comerciante solicita su carta de naturalización, documento que obtiene el 10 de mayo de 1843 y cuya fuente la conserva el Archivo Nacional de Honduras.
En una fecha que no se ha logrado precisar don Jorge contrajo nupcias en Tegucigalpa con la joven Francisca Lazo, hermana de José Esteban Lazo, compañero de andanzas del explorador norteamericano William V. Wells (1857) quien se desempeñó como dibujante en su gira por Olancho.
Collier una  vez radicado en Yuscarán, multiplica sus descendientes en diferentes alianzas conyugales. Con Irinea González procrea un hijo llamado Pantaleón, tiempo después un 18 de marzo de 1878; organiza una compañía accionista denominada Sociedad Minera de Yuscarán, figurando en la nómina de socios don Abelardo Zelaya, el presidente Luis Bográn, Daniel, Alecio, Camilo y Simón Fortín. La compañía tuvo un éxito moderado, , debido a que los accionistas no pagaban sus cuotas en forma regular sin embargo, los directores declararon pequeños dividendos. Antes que la compañía fuera disuelta en 1884.

Fuentes


Antonio R. Vallejo, Noticia Histórica de las minas de Honduras, año 1886
Boletín de la Biblioteca y del Archivo Nacional, año 1941.
Abogado Jacinto Rivas,  Diario El Cronista  Jueves 25 de febrero de 1959
Lic. Hector Ramón Cortés, Revista “Yuscarán Ayer y Hoy”,  Numero 2, enero 2012



jueves, 7 de enero de 2016

La familia Xatruch

Por Lic. Hector Ramón Cortés

General Florencio Xatruch
Además de hondureños la frase que representa a toda la hondureñidad es Catrachos, se dice que este mote se debe a la derivación o deformación en el transcurso del tiempo, que los nicaragüenses hicieron de la frase “Ahí vienen los Xatruches” al referirse a la llegada del ejercito comandado por el General Florencio Xatruch, que fue derivándose a Catruches y luego Catrachos.

Este singular personaje fue presidente de Honduras del 26 de marzo al 17 de mayo de 1871, hermano de Don Pedro Xatruch e hijos ambos de Ramón Xatruch un minero Catalan y de Doña Eugenia VIllagra originaria de Choluteca, don Ramón se estableció en el mineral de San Antonio de Oriente.

Don Ramón Xatruch fue habilitador de minas en Yuscarán en 1818.

Don Pedro Xatruch en 1846 era dueño de la mina Guayabillas, en 1849 junto a Cayetano Morazán fue dueño de la Mina “Señor Ayala” hoy La Suiza, en 1851 poseía la mina Santa Rita. El 8 de marzo de 1843 nace su hijo Pedro José en esta ciudad de Yuscarán, su esposa se llamaba Mercedes Gardela a quien el cura Angel Carrasco bautizó el día,  7 de marzo.  Este niño tuvo  corta vida  y murió el 18 de marzo del año siguiente 1844. Pedro Xatruch fue alcalde primero de Yuscarán y Jefe del distrito de Yuscarán en 1854.

Casa donde vivio Florencio Xatruch
Don Florencio Xatruch, natural de San Antonio de Oriente, vivió mucho tiempo en Yuscarán, teniendo también posesiones mineras, este era militar activo y cambiaba constantemente de domicilio. Se casó en Yuscarán el 23 de abril de 1842 con Eusebia Zuniga  hija natural de la ya finada Ana Zuniga, fueron testigos de su boda José Avila y Benita Franco. Y la ceremonia celebrada por el presbitero Angel Carrasco.  

En 1844 bautiza en Tegucigalpa a su hija Rafaela Isabel, esta nació 23 de octubre de 1844 y falleció en Managua el 6 de noviembre de 1913, a las 10 de la noche, estaba casada con un médico llamado Andres. 

Su primera esposa, Maria Eusebia Zuniga muere en Yuscarán el 17 de agosto de 1746.

Florencio Xatruch se vuelve a casar en Yuscarán el 3 de enero de 1852 con la señorita Abigay Flores hija de Don José María Flores y Doña Antonia Hernández originarios de esta ciudad de Yuscarán, este matrimonio es muy interesante ya que para efectuarse don Florencio, estando en Pespire  le otorga poder a su hermano Pedro a través del abogado José María Molina, para que lo represente en la ceremonia oficial de su boda,  ya que por cuestiones de trabajo tiene que estar en el mineral de Moramulca el día de su boda. Según costa en la certificación extendida por el cura Angel Carrasco la boda se efectuó sin mayor atraso ya que así lo permitía el Sagrado Concilio de Trento.

El 27 de noviembre de 1846 cuando se está creando la universidad Nacional en Tegucigalpa, en Yuscarán se recoge una contribución para apoyar el establecimiento de este, entre los contribuyentes figuran Marcelino Cerrato (20 pesos), Juan Ramírez (18 pesos), Juan Pablo Andrade (5 pesos), Luisa Andrade (5 pesos) y Florencio Xatruch (5 pesos).

Cuentan los historiadores que el General Francisco Morazán solía visitar Yuscarán los fines de semana y participaba activamente en las fiestas que ofrecían en la casa de Florencio Xatruch y también en la casa  de la familia Arbizú situada hoy donde está el negocio de Doña Esmeralda de Cortés.

Florencio Xatruch nació en San Antonio de Oriente el 21 de octubre de 1811 y murió en Managua, Nicaragua el 15 de febrero de 1893. Lugar donde descanzan sus restos. 

Fuentes: Archivos Parroquiales de Yuscarán, Denuncios de Minas - Archivo Casa Fortín, Archivo Nacional de Honduras. 

El hospital departamental de Yuscarán - año 1880

Por Lic. Hector Ramón Cortés

Un trozo de la historia de Yuscarán tiene que ver con el intento de establecer en ésta, un Hospital Departamental como parte de la Reforma Liberal liderada por el Presidente Marco Aurelio Soto y su primo Ramón Rosa, se propuso e impulsó la creación de Hospitales Públicos en las cabeceras departamentales.


Casa que se destino para ser el Hospital
Departamental de Yuscarán 
Así lo registra la siguiente Ley creada a tal efecto y publicada en el diario Oficial La Gaceta del  8 de junio de 1880:

Considerando que es un deber del Gobierno poner en práctica todos los medios que estén a su alcance para auxiliar a las clases menesterosas de la sociedad  y remediar en todo lo posible sus necesidades; Que para atender a tan importante objeto es indispensable, como primordial medida de protección a los menesterosos, acordar el establecimiento de Hospitales en los principales centros de población de la República, y escoger  los medios eficaces para que se constituyan y sostengan esos establecimientos de beneficencia: Que los sentimientos de humanidad y los dictados de la conveniencia pública determinan al Gobierno a tomar particular intereses en la pronta fundación de Hospitales, y a fijar, para su estable sostenimiento, la clases de recursos que deben allegarse con la cooperación debida de la generalidad de los hondureños por tanto: DECRETA:

Art.1 Se previene el establecimiento de un Hospital General en la ciudad de Tegucigalpa, debiendo establecerse en cada cabecera de Departamento, lo mismo que en la ciudad de San Pedro Sula y los puertos de Amapala y Trujillo.

Art.2. Los Hospitales, cuyo establecimiento se previenen en el artículo anterior, serán regidos por una Junta Directiva compuesta de los individuos que siguen:  Un Director, dos Consiliarios, un Secretario y un Tesorero.

Art.3. Por esta vez y para el efecto de que se funden prontamente los Hospitales, el Gobierno hará el nombramiento de individuos de la Juntas directivas.

Art.4. Una de las primeras obligaciones de las Juntas directivas será la de promover, en su respectivo  Departamento o población, la inmediata creación de Sociedades de beneficencia, de individuos  de ambos sexos, que concurran con sus haberes o servicios personales al sostenimiento de los Hospitales que se establezcan.

Art. 5. Las Sociedades de beneficencia serán presididas y regidas por las Juntas Directivas de los Hostpitales.

Art.6. Los individuos de las Juntas directivas, cada dos años, serán electos o reelectos por mayoría absoluta de votos de los individuos que compongan las Sociedades de Beneficencia y que tengan el carácter de contribuyentes con recursos monetarios.
Art. 7. Son fondos para la creación y sostenimiento de Hospitales: 1º. Un dos por ciento que sobre todo derecho de importación se pagará con el indicado objeto en las Aduanas. 2º. Todas las donaciones y legados que, en el respectivo Departamento o Población, se hayan hecho o se hagan a los pobres. 3º. Los donativos que para el Hospital hagan los particulares. 4º. Las subvenciones que mensualmente contribuyan los individuos de las Sociedades de beneficencia.

Art. 8. Los fondos indicados serán recaudados y administrados exclusivamente por los Tesoreros de los Hospitales, que estarán sujetos a las órdenes e inspección de las respectivas Juntas directivas.

Art. 9. El dos por ciento que sobre derechos de importación cobren los Administradores de aduana en beneficio de los Hospitales, será entregado a los respectivos Tesoreros, en justa proporción a la importancia y necesidades de los Hospitales que se establezcan. El Gobierno, previos los informes correspondientes, determinará la distribución de dichos fondos.
Art. 10. Las juntas directivas de Hospitales con vista de los recursos, necesidades y circunstancias de los vecinos de su respectiva localidad, propondrán al Gobierno acuerde las medidas oportunas para la provisión y aumento de fondos necesarios para el mantenimiento de Hospitales.

Art.11. La junta directiva del hospital General de Tegucigalpa formará el Reglamento que corresponda a su constitución y dirección y a los servicios del Establecimiento y lo someterá al Gobierno para su examen y aprobación.
Art. 12. Las Juntas directivas de los demás Departamentos, de San Pedro Sula, Amapala y Trujillo, sobre las bases del Reglamento del Hospital General y con las modificaciones requeridas para cada localidad, formarán también sus respectivos reglamentos, que estarán también sujetos al examen y aprobación del Gobierno.
Art.13. El Gobierno por medio de decretos y acuerdos especiales, desarrollará las prescripciones de esta ley, tanto en lo relativo a la organización y dirección de los Hospitales, como en lo referente a los fondos con que deben contar para su sostenimiento y su estabilidad.


Dado en Tegucigalpa, en la casa de Gobierno, a los dos días del mes de Junio de 1880.
Marco A. Soto, El Secretario General Ramón Rosa y Por disposición del Señor Presidente, imprimase y publíquese. Ramón Rosa.

El 21 de junio del mismo año 1880 se procedió a crear la Junta para el Hospital de Yuscarán, mediante el siguiente decreto:  Debiendo nombrarse, de conformidad con el Decreto de 2 del corriente, la junta Directiva del Hospital de Departamento de El Paraíso; el Consejo de Ministros en ejercicio del Poder Ejecutivo.

ACUERDA: Nombrar Director del Hospital a Don Mónico Córdova; primer Consiliario, al Presbítero Don Francisco Andrade; segundo Consiliario a Don J. Camilo Fortín; Secretario a Don Basilio Torres, y Tesorero a Don Francisco Murillo. Comuníquese y regístrese. Rosa El 21 de junio del mismo año 1880 se procedió a crear la Junta para el Hospital de Yuscarán, mediante el siguiente decreto:  Debiendo nombrarse, de conformidad con el Decreto de 2 del corriente, la junta Directiva del Hospital de Departamento de El Paraíso; el Consejo de Ministros en ejercicio del Poder Ejecutivo.

Interior de la Casa que seria el Hospial
departamental de Yuscarán
Desde el año anterior o sea 1879, don Mónico Córdova siendo Gobernador Político del Departamento, pretendía hacer donación de una casa que adquirió por vía de enajenación, que por una deuda de 638 pesos le debía Don Marcial Colindres. De lo anterior da constancia el acta levantada el día 13 de agosto de 1879 en sesión extraordinaria de la corporación municipal bajo la presidencia del Gobernador de este círculo.

La casa pertenecía al deudor y los demás acreedores,  además trescientos pesos invertidos en reparos y que menciona el secretario que Don Mónico Córdova estaba dispuesto y por vía de donación y subsidio y como mejor haya lugar para que se construya allí un lugar para la escuela pública ya que la municipalidad no tiene para ese entonces un lugar.
La donación se efectuó de conformidad al deseo de don Mónico Córdova, previo a ello se tuvo que solicitar a la otra parte dueña de la casa que hiciera lo mismo o vendiera su parte. El resto de la casa también fue donada por los herederos de don Pedro Maradiaga.

Es en 1880 que el gobierno pone en práctica su plan para construir Hospitales en las cabeceras departamentales. La gobernación política decide que el inmueble donado por don Mónico Córdova sea utilizado para el proyecto del Hospital Departamental. La casa de la que hablamos es la casa que por muchos años ocupó la escuela de Varones y posteriormente el Instituto Doctor Presentación Centeno.

En ese mismo año de 1880, el 15 de octubre, Don Daniel Fortín Gobernador Político, dirige una nota al Señor Alcalde Municipal contestándole una misiva que el Alcalde le había dirigido poniendo a disposición algunos fondos que pertenecían a la parroquia de Yuscarán con el fin de utilizarlos en la construcción del hospital departamental, Don Mónico le indica al alcalde que es a la Junta Directiva del Hospital a quien tiene que entregarle dichos fondos.

El 12 de abril de 1882, El Señor presidente de la junta directiva del Hospital del departamento informa:  Con motivos de haber traído el agua de la quebrada de la Soledad para los trabajos del Hospital, el encargado de hacer el Hospital de esta ciudad, para traer el agua a los trabajos tuvo que hacer una zanja por la calle de la Ronda, frente a las casas de Don Albino Raudales y del Presbítero Francisco Andrade, habiendo roto el empedrado de ella, y estando próximo a la estación de lluvias, sirva mandar a componer la expresada calle, dejándola en el estado en que estaba antes, para evitar así su completa ruina. Soy de Ud. S.S. El Gobernador Político de este departamento.

Con fecha 24 de marzo de 1884, Don Mónico Córdova como presidente del Comité pro Hospital, le indica al Señor alcalde que está de acuerdo con dividir la Casa del Hospital para que una parte funcione como escuela pública, pero que los costos de dicha separación o división deben correr por cuenta de la alcaldía, ya que los dineros del hospital ya están bastante limitados.

En septiembre  de 1884, la Secretaría de Estado en los Despachos de Instrucción Pública con despacho del 27 de febrero, autoriza a la Municipalidad de Yuscarán, utilizar las piezas de la casa del Hospital que se construye en Yuscarán para ser utilizados para la escuela pública.

El 12 de enero de  1885, El señor Alejo Rodríguez da cuenta de la madera utilizada para la construcción del Hospital: Cuatro cargas y media de morillos a tres reales cada uno, siete tablones a cuatro varas, a 1.5 reales vara.

Todavía para enero de 1889, Yuscarán sigue soñando con tener un hospital, así lo refleja un reporte en los libros del Gobernador Político, que describe algunos gastos entre ellos 5 pesos en el trabajo del hospital, 20 pesos en el mes de Junio para el repello, 1 peso para el carpintero, trabajo de 2 días para construir las bancas, 20 pesos se gastaron en la función de Maroma (3 de abril) y se recibieron de una función de Comedia en beneficio del panteón y del hospital.
No se tiene noticia que el hospital haya sido inaugurado como tal, ni se encuentran hasta el momento documentos que registren su equipamiento, suponemos que ante la disyuntiva educación o salud, las autoridades de ese tiempo apoyaron la de educación.

Fuente: Gaceta Oficial de Honduras, Actas Municipales de Yuscarán, Archivo del Gobernador Político, Archivo de la Casa Fortín

El mercado San José

Por Lic. Hector Ramón Cortés

Mercado San José, Yuscarán
Muchos pasamos por ahí, incluso la mayoría de gente que vive en Yuscarán compra en este lugar las frutas y verduras, pero pocos saben de su historia. Hoy comparto con ustedes  la historia del establecimiento del mercado de Yuscarán hace ya 98 años.
En épocas más antiguas la venta de frutas y verduras en Yuscarán, se realizaba en las calles, especialmente en la calle de entrada cerca de La Suiza o Plantel Zurcher, otro lugar donde se acostumbraban ubicar los vendedores era en el Patio Grande o Bario San José y los corredores de las casas de la plaza.

Fue hasta 1915, siendo alcalde Don Camilo Cortés Sevilla, hijo de don León Cortés y Gregoria Sevilla, que en sesión ordinaria celebrada el 1 de octubre de 1915 y presidida por el señor alcalde Cortés, asistieron los regidores don Rosendo Nolasco S, don Ladislao Urrutia R, don Adolfo Colindres M, el Síndico don Alecio Fortín Machado, el Alcalde manifestó: que hace algunos años viene notando la necesidad de un mercado en esta ciudad para el hospedaje de vivanderos, fruteros, verduleros y hortelanos quienes hacen sus ventas a la intemperie en las calles y corredores de ajena pertenencia, sin ninguna seguridad en sus personas e intereses. Decía que es un deber de las municipalidades garantizar aquellos, promover y fomentar los establecimientos de utilidad pública. Hizo la moción en el sentido de que se habiliten las piezas del piso bajo de esta Sala Consistorial y ponerlas al servicio del referido Mercado, para ello no exigen más que refraccionar las paredes interiores, abrir una puerta por el lado del boquete que hay para el lado del poniente, otra que de salida al zaguán para servicio interior con su correspondiente portón en el tapial noroeste con persiana al frente del corredor. Expuso que había podido fomentarse de lo exiguo de las rentas con que cuenta el tesorero municipal para hacer frente al gasto de seiscientos pesos a que asciende el presupuesto formulado con tal fin; pero que siendo la obra proyectada de urgente necesidad, gestionaba en el sentido de que la municipalidad eleve al Supremo Poder Ejecutivo una solicitud en demanda de su valiosa ayuda en la proporción pecuniaria que estime conveniente, beneficio que de antemano comprometerá la gratitud de este pueblo amigo y afiliado a su soberano. La municipalidad resolvió que se mande a ejecutar la obra, comisionando al señor alcalde municipal para que solicite del Supremo Gobierno un subsidio para llevar a término tan meritoria obra.


El 15 de noviembre el señor Alcalde dio cuenta: de haber cumplido su comisión encomendada por la Municipalidad en sesión ordinaria del 1 de octubre pasado, a fin de  solicitar al Supremo Poder Ejecutivo una ayuda por la cantidad que estime conveniente para llevar a cabo el Mercado que se está construyendo en los pisos bajos del Cabildo Municipal; y al efecto informó la consignación del Gobierno del Dr. Membreño de un subsidio de ($ 400) cuatrocientos pesos, que serían  pagados, según acuerdo Ejecutivo fecha 29 del mes de octubre, en la administración de Rentas de este departamento. (Sesión de Corporación del 15 de noviembre 1915).


El costo de la adecuación del Mercado provocó  un gasto de 800 pesos, después de haber elaborado un presupuesto más preciso,  de los cuales 400 fueron aportados por el gobierno central y el resto por la municipalidad, según consta en el presupuesto para tal obra.


Las obras se efectuaron sin atraso y pronto la adecuación de la parte baja de la Municipalidad estuvo lista para ser inaugurada. La municipalidad, tomando en cuenta que el año estaba para expirar y deseando que en la trasmisión del poder local, se verifique en un acto suntuosisimo la inauguración del Mercado revista una fiesta simpática, como recuerdos de la corporación de 1915, se resolvió: que se efectué la trasmisión y la inauguración del edificio del mercado, a las nueve de la mañana del día primero de enero de 1916; y que se autorice al señor Alcalde Municipal para que haga el gasto de 150 pesos, para la celebración.(Acta Municipal de la sesión del 2 diciembre 1915, punto 2)

Conflicto de Intereses.
A solo 2 años después de haberse establecido el mercado, en 1917 se dan los primeros conflictos de intereses entre los pulperos y las señoras que bien surtidas tenían sus puestos en el mercado. El alcalde Alecio Fortín Machado expone:  Que en  vista de que ya hay varias señoras que tienen puesto fijo en el mercado San José, donde tienen víveres o comestibles de
Mercado de Yuscarán
Pintura de Hector R. Cortés
venta a manera de pulpería, quienes directamente o indirectamente monopolizan los artículos que llegan al mencionado mercado, por lo que han hecho presente su malestar las pulperas de la ciudad por su poca realización en sus establecimientos. (Acta Municipal de sesión de corporación municipal del 1 de septiembre de 1917, punto 5)

En la misma fecha resuelven lo siguiente: Considerando que el mercado San José de esta ciudad, no ha dado hasta la fecha un beneficio positivo deseado, que como está actualmente antes bien ocasiona gastos al municipio. Por tanto: La municipalidad en uso de las facultades que la ley le confiere. Acuerda: Establecer desde hoy el impuesto de (0.25) veinticinco centavos mensuales a las personas que ocupan puesto fijo en el mercado durante el mes o la mayor parte de él y elevar este punto de acta al conocimiento del Honorable Consejo Departamental para su aprobación.

Cierran el Mercado
En 1923 siendo alcalde don Carlos Rodríguez, manifestó a la corporación que: “Constantemente se oye el clamor del vecindario, quejándose de que las mujeres que tienen puestos en el mercado, monopolizan todo lo que llega, a precios muy bajos para venderlos después a mayor cantidad, obteniendo así un pingüe negocio y en grave perjuicio para la generalidad, pero sucede que cuando llega la noticia a los vecinos de los barrios, que tal o cual cosa ha llegado al mercado, cuando llegan ya ha sido rematado por las revendedores, y las venden a un precio recrecido teniendo que comprarlo así la pobrería por necesidad;  que también ha tenido oportunidad de oír decir a los vivanderos repetidas veces que les hacen bulla las mujeres del mercado para  hurtarles sus víveres, esto sin dirigirse a determinada persona, sino que lo hacen en sentido general, con lo que lesionan la honradez de algunas de ellas que no acostumbran negociar con lo ajeno”. Expone: “Que como el mercado ha sido autorizado con el objeto de garantizar a los que vienen con sus ventas; por lo anterior pongo en conocimiento de la corporación para que si lo estima a bien, acuerde la desocupación del mercado por las mujeres mencionadas  y que se trasladen las que pretendan continuar en su negocio a la casa que pertenece a los herederos de don Belisario Hernández, la que tiene  conseguida pagando la municipalidad un módico alquiler”. La corporación en vista de lo expuesto  por el señor alcalde y siendo ella la llamada para corregir los males como los que afirma el señor alcalde y ver por el bien general del vecindario, Acordó: Que las mujeres que tienen puestos de ventas en el mercado desocupen el día de mañana el edificio; comisionando al Regidor encargado del mercado don Pedro Peña N; para qué les haga saber que la que desea seguir con su negocio se traslade a la casa de los herederos de don Belisario Hernández, de la que ha tomado la municipalidad  un arrendamiento para tal fin; y aprobar el contrato hecho por el señor Alcalde referente al edificio mencionado y que el gasto de ($ 5.00) cinco pesos que costará el alquilar se importe a impuestos del ramo de gobernación del presupuesto municipal.  (Acta de Sesión del 2 de julio de 1923, punto 2)

Reapertura del Mercado
En la sesión ordinaria 16 de julio de 1923, el secretario municipal dio lectura a una solicitud presentada por las señoras Joaquina Calona, Isabel Sierra y Juana Valle, en que piden a la corporación se reconsidere un acuerdo o notificación y recurso de alzada, por lo que la municipalidad tomando en cuenta: 1ro. Que las mujeres que tienen puestos de ventas en el mercado solo se ocupan de acaparar los víveres que vienen a él, con grave perjuicio de la población por más vigilancia del colector, es imposible corregir este abuso, la corporación se propone a que haya efectividad en la ley, no trata de favorecer a ninguna persona como lo manifiestan las solicitantes, no obstante de que se les ha prohibido que no ocupen el mercado se han quedado en el corredor de la casa de Ceferina Díaz, continuando su tarea infame de acaparar los víveres que entran al referido mercado, todo esto lo hacen valiéndose que pertenecen al sexo débil y ya 

3. Que las que deseen continuar el negocio de pulpería, se pasen a la casa que tienen habilitada la corporación o sea la de los herederos de don Belisario Hernández.
2. Que las pulperías que se encuentran en el corredor de la Casa de doña Ceferina Díaz y en los demás corredores de las casas cerca del mercado San José de esta ciudad paguen el respectivo impuesto como pulpería.
3. Que las que deseen continuar el negocio de pulpería, se pasen a la casa que tienen habilitada la corporación o sea la de los herederos de don Belisario Hernández.
4. En acatamiento de la excitativa del honorable consejo departamental que se haya consignada en el acta celebrada por la corporación municipal el día quince de octubre de mil novecientos diez y siete; que dice:”Yuscarán, 2 de octubre de 1917, Señor secretario municipal P. Con aprobación de este consejo departamental devolvo el acuerdo de la certificación adjunta: Sírvase manifestar a esa municipalidad que este consejo en sesión de ayer acordó excitarla en el sentido de que los víveres que llegan al mercado no se rematen antes de tres días, para evitar que sean acaparados por usureros con perjuicio del vecindario, esto si no les es posible confeccionar un reglamento para la administración de dicho mercado. Soy de Ud. Att. S. J. Cerrato Lezama”
Se dispuso nombrar una comisión compuesta del Señor Alcalde, Regidor 4to y el síndico para que elaboren el referido reglamento y den cuenta en la próxima sesión, para cortar así tanta queja de los vecinos y de los vivanderos.
Las vendedoras vieron florecer su petición, volvieron al lugar del mercado, eso sí pagando impuestos como las pulperías y sometiéndose a un reglamento para las ventas en el mercado. Desde ese tiempo quedó establecido en ese lugar el mercado San José, tocándoles compartir el espacio algunas veces con La Imprenta Morazán, o la Planta de Energía Eléctrica que a finales del siglo pasado se instaló en la parte trasera del edificio.

El edificio que alberga al mercado está ubicado entre la calle de La Estación y la Calle de La Amargura, la calle de atrás del mercado se le conocía así por estar ubicada allí el cuartel y la cárcel pública justamente en ese mismo edificio, hasta que se inaugura la Casa Nacional y se trasladan allí el cuartel y la cárcel. Este edificio de dos plantas se cree fue propiedad de los Señores Vizcay a finales de los 1700s y luego de las señoras Arbizú a principios de los 1800s, ya para 1849 se  menciona como el edificio del Ayuntamiento o Sala Consistorial.

Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy", septiembre 2013
Fuentes: Actas Municipales y Archivo del Gobernador  de Circulo, Archivo Casa Fortín


La trajedia de Liberato Moncada

Por Oscar Wilfredo Lezama 

Lucila Gamero
Moncada
de Medina
La Famosa escritora danlidense doña Lucila Gamero Moncada de Medina, con regular frecuencia visitaba en Yuscarán a sus parientes Don Santiago Moncada y familia. Don Santiago distinguido personaje y dinámico comerciante de esta ciudad, dueño de la Casa que en la actualidad pertenece a los herederos de Don Luis Raudales ubicada en el lado suroeste de la iglesia Católica. Doña Lucila Gamero en sus estadías aquí se relacionaba con  la alta sociedad, de esa forma se informó del idilio apasionado entre el licenciado Liberato Moncada (para ese entonces) y la señorita Gregoria Córdova cariñosamente conocida como “Goyita”, ella miembro de la respetada familia Córdova Serra.

Este romance, resulto en un triángulo amoroso debido a que la familia Córdova no aceptaba al licenciado Moncada porque sus aspiraciones eran casar a Goyita con un extranjero, empresario o diplomático de los que residían en esta  Sultana de Oriente, por lo que a Don Liberato le hicieron la vida imposible, resultando al final que Goyita se quedó soltera  por un tiempo y el licenciado  Liberato Moncada se llenó de melancolía, sufrimiento que llevó hasta el día de su muerte. Para entonces se comentó que había muerto producto de una enfermedad infecto contagiosa, situación que llevó a su familia posteriormente a solicitar la exhumación del cadáver, hacerle el análisis correspondiente y demostrar que su muerte no se debió a enfermedad infecto contagiosa.
Hermanas Julia, Francisca y Goyita Córdova

En la Gaceta Oficial del 4 de mayo de 1892, se publica el acuerdo en que se autoriza a la madre de Don Liberato Moncada, la Señora Felipa G. de Moncada, practicar la exhumación de los restos de su hijo Licenciado Liberato Moncada, sepultado en el Cementerio de Yuscarán; considerando que ha transcurrido más del tiempo que señala la ley para que puedan hacerse las exhumaciones de restos humanos, para  comprobar que el referido Señor Moncada no murió de enfermedad contagiosa.
Paginas del Corazón 

Gregoria Córdova no logró casarse con el norteamericano y se quedó soltera un buen tiempo,  se casó el 26 de abril de 1904  con  Cornelio Moncada Rastrick hijo del doctor danlidense Cornelio Mocada difunto para ese tiempo y de doña Romilda Rastrick viuda de Moncada. Se trasladaron a vivir a Tegucigalpa donde el 11 de junio de 1905 nació su único hijo que murió joven sin dejar descendencia. Su hijo Cornelio Antonio Moncada Córdova se graduó de médico en Hamburgo, Alemania. En San Pedro Sula el año de 1934 el  joven médico se infectó tras extirpar un ántrax de nuca,  desarrollando septicemia estafilocócica, que en un mundo sin antibióticos ni sulfamidas, no hubo medio para salvarlo y le arrebato la vida en menos de una semana. El Sésamo de Puerto Cortés lleva su nombre recordando su memoria.


Esta historia sirvió para que la connotada escritora se inspirara y escribiera si no la primera, una de las primeras novelas de su notable producción “Paginas del Corazón”

En el libro “Cuentos Completos” de Lucila Gamero de Medina compilados por la escritora Carolina Alduvín, publicados por la editorial universitaria en el mes de agosto de 1997, en “Historia de un Amor”, nos encontramos con la protagonista Gabriela Cordero, quien correspondía el amor del joven Leopoldo Montero, contando a su vez con la aceptación de su padre don Marcelo Cordero. El lector podrá dilucidar que para nombrar los personajes de la vida real, casi siempre la novelista usaba seudónimos, teniendo el cuidado de valerse de sus letras iniciales tanto de sus nombres como apellidos: el joven enamorado tuvo el golpe fatal cuando recibió la carta concebida en estos términos:

Caballero: Entre usted y yo, no hay nada que nos ligue; al menos así lo creo y quiero. Le devuelvo el anillo que de usted conservaba, lo mismo que sus cartas; y espero que usted se sirva enviarme todo aquello que de mi procedencia tenga.
No trate de indagar el móvil que he tenido para adoptar esta resolución, pues no estoy dispuesta a dar a usted explicaciones de ninguna clase.  Olvide para siempre los lazos que en un tiempo nos ligaron; lazos que, ya no puedo desatarlos, los rompo, adiós! Gabriela Cordero.

La narrativa finaliza haciendo hincapié en los dictados del corazón, para no dejarse llevar por los impulsos del dinero o linaje.  La verdadera felicidad estriba en la comprensión que toda pareja conyugal desea perpetuar.

Doña Goyita Córdova fue de las últimas herederas de don Mónico Córdova  y la que vende al Estado de Honduras en 1947 la hermosa casa de La Familia Córdova que hoy ocupa la Policía Nacional, El Registro Nacional y parte de la Fábrica de Aguardiente Yuscarán en esta Sultana de Oriente. 

Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy"
Fuentes: Diario Oficial La Gaceta, Diario La Tribuna, colaboración especial de historiador danlidense  Dario Gonzalez. 

Don Liberato Moncada

Por Lic. Hector Ramón Cortes

Hoy hablaremos de alguien que precisamente no nació en Yuscarán, pero que en esta ciudad hizo muchas de sus ejecutorias que pusieron en alto el nombre de nuestro amado rincón.

Liberato Moncada, nació en Danlí, departamento de El Paraíso en el mes de noviembre de 1855; fueron sus padres don Benito Moncada originario de Yuscarán y doña Felipa Garmendia. Muy joven se trasladó a la ciudad de León Nicaragua, con el propósito de seguir allá una carrera profesional. Muchas dificultades se le presentaron para conseguir su objetivo, debidas principalmente a la pobreza pero no desmayó en su empeño, supo triunfar y a los 27 años ya había alcanzado con lucimiento el título de abogado. Luego regresó a Honduras, visitó la capital donde se hizo apreciar de cuantos le conocieron y trataron y pasó a Yuscarán a hacerse cargo de la judicatura de Letras de esta sección.

Así mismo continúa recogiendo y ordenando las obras del distinguido periodista y orador hondureño, don Álvaro Contreras, para hacer una edición completa de ellas, pero este proyecto como otros muchos que pensaba poner en ejecución, quedó sin realizarse. Él tenía un corazón delicado de esos que al decir Lord Byron, no sirven para soportar durante meses y años la pesada carga de las penas íntimas que otros saben llevar encima, hasta que la vejez los encierra en la tumba. Sobrevino para él una desgracia, que juzgó irremediable: su novia iba a casarse con otro. Esto le fue insufrible. Enfermó gravemente y a los tres días había rendido el espíritu, falleció el 14 de mayo de 1886, en la flor de sus años y cuando estaban convirtiéndose en realidad sus sueños de posición y renombre, fundados en el talento, en el estudio y la virtud.
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En el mes de Julio de 1884 cuando el presidente Luis Bográn visitó nuestra ciudad de Yuscarán, Liberato Moncada fue invitado por la Gobernación Política para que pronunciara el discurso de bienvenida. Liberato Moncada también acompañó al Señor Presidente junto al Gobernador Político en la continuación de su viaje hacia la ciudad de Danlí, después que el presidente permaneciera durante cuatro días en Yuscarán, donde fue muy bien atendido por sus tíos, tías y demás familiares.

En 1855 volvió a Tegucigalpa como diputado al Congreso ordinario, por el departamento de El Paraíso. Entre otros de sus importantes labores en aquel Congreso, figura la de haber contribuido eficazmente a que se dictara el decreto de 19 de marzo de 1885, por el que se reformaron varios artículos del Código de Minería. En este trabajo contó con la cooperación de su digno amigo el Dr. don Policarpo Bonilla.

Cerradas las sesiones de la asamblea nacional en 1885, regresó a Yuscarán, a continuar en el ejercicio de la Judicatura de Letras en esta cabecera, se dedicaba al cultivo de las letras en los ratos que sus tareas le dejaban libre, remitía sus artículos a “La República” de la capital, que los acogían siempre con suma complacencia.

En el campo literario publicó una serie de artículos entre los cuales se cuentan Comedia y Drama, escrito en 1885, y dedicado a sus profesores e inolvidables amigos abogados Constantino Ortiz y Mariano Barreto, Los Dos Sepulcros escrito en el Paraíso en 1884 y dedicado a sus menores hermanos. La primera página dedicada al profesor José Clemente Chavarría, escrita en Yuscarán en 1886.

En la Gaceta Oficial del 4 de mayo de 1892, se publica el acuerdo en que se autoriza a la madre de Don Liberato Moncada, la Señora Felipa G. de Moncada, practicar la exhumación de los restos de su hijo Licenciado Liberato Moncada, sepultado en el Cementerio de Yuscarán; considerando que ha transcurrido más del tiempo que señala la ley para que puedan hacerse las exhumaciones de restos humanos, y que se ha comprobado que el referido Señor Moncada no murió de enfermedad contagiosa.

Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y hoy", septiembre 2013
Fuentes: Gaceta Oficial, Archivo de la Gobernacion del circulo de Yuscarán Casa Fortin Yuscarán. 

El puente de Potrerillos

Por Lic. Hector Ramón Cortés
Antiguo puente de Potrerillos
Debido a la importancia que siempre ha tenido la ciudad de Danlí, la relación natural de Yuscarán con esta, ha sido muy profunda y a veces antagónica. Desde sus inicios Yuscarán fue poblada por muchas familias españolas y  criollas de varias partes de Honduras incluyendo varias familias de la Villa de Danlí.  La comunicación terrestre entre estas dos localidades se miraba opacada especialmente en los meses de invierno por las crecidas del río Choluteca.

El paso del río Choluteca.
La vía para llegar a la ciudad de Danlí no era la misma que hoy conocemos, en ese tiempo se realizaba por las cercanías del Mineral de Potrerillos por el lado de la aldea del Chaguite Oriente (Yuscarán), debido al auge minero y comercial la comunicación a través de esta vía era muy fluida.
Los que se conducían para Morocelí el paso del río lo hacían por el lado del Guayabo. En los meses que el clima lo permitía el río se atravesaba a través de canoas por el paso del Guayabo. Entre los canoeros en 1909 figuran los señores Juan Felipe y Simeón Durón y la canoa se llamaba “La Julia”. Estos dueños de la canoa estaban exentos del pago de impuestos como una contribución por parte de la municipalidad a los servicios que le prestaban al vecindario, lo anterior a excitativa del poder ejecutivo en circular enviada con fecha 7 de agosto de 1909.
Para 1914 la municipalidad de Yuscarán autoriza un gasto de 5 pesos para la garrucha del cable,  que servían para templar la balsa que se utilizaba para trasportar a los pasajeros que se conducían a la ciudad de Danlí o a Morocelí.
Todavía para 1917 “La Julia” estaba en uso en dicho paso, cabe mencionar que cuando se construye la actual calle a Danlí, el puente sobre el río Choluteca fue construido en este mismo lugar denominado El Guayabo.

El antiguo puente colgante de madera
A mediados de los 1800s el paso por el sector de Potrerillos se realizaba por un puente colgante construido de tablones de madera sostenido por cables. Para 1895 este viejo paso aún existía pero en condiciones muy deplorables.


Con fecha 27 de marzo de 1895 el Gobernador político Don Nicolás Flores excita al señor alcalde municipal para que de acuerdo con la municipalidad de Danlí dé la refracción del puente de Potrerillos que es de tanta utilidad para ambas poblaciones y para la generalidad entera. En esa nota se notifica que se ha designado el 6 de abril para que las municipalidades en cuerpo y por medio de su vocal y un comisionado entendido en el trabajo de que se trata, concurra ese día al lugar indicado a donde también acudirá el señor Gobernador para levantar un presupuesto y hacer cuanto sea necesario, para llevar a cabo la obra, informando también que ha excitado al supremo gobierno para la colaboración de dicha reparación.

El 5 de mayo de ese mismo año, la Gobernación Política le pide al señor alcalde que deseando hacer la contrata formal de la reparación provisional del puente de Potrerillos, que a más tardar el día siguiente le reúna a los carpinteros más formales y aptos de esta ciudad y que el crea puedan comprometerse a hacer la refracción que se ocupa.
El 6 de junio de 1895, el señor gobernador informa que ya las municipalidades tienen listos los fondos para la reparación del puente por lo que se hace necesario el nombramiento de una persona para administrar dichos fondos hasta la conclusión de la obra. Para esto se nombra al señor Juan Carías quien desempeñará dicho cargo de forma gratuita y se encargará de pagar las planillas y los recibos que se le presenten por el contratista, el administrador rendirá cuentas al gobernador.

El día siguiente, 7 de junio, el gobernador informa que se han recibido 160 pesos, de los cuales 100 han sido pagados al contratista Ciriaco Medina para las reparaciones del puente y  60 pesos en efectivo, de esta suma 150 han sido suministradas por la municipalidad.

Ya para el 7 de julio de ese mismo año, el señor gobernador solicita al alcalde que en coordinación con la municipalidad de Danlí deben nombrar un comisionado que examine la obra, a fin de informar al gobernador si se cumplió con la contrata.

A mediados del mes de julio el comisionado  para revisar el trabajo de reparación, don Manuel Quiñonez, informa al alcalde de Yuscarán que los tirantes y planchas que sostienen el puente están en buen estado, que las planchas ya han sido sustituidas por nuevas y que del entablonado han sido ya cambiado 35 tablones, restando cambiar 20 que todavía se observan en mal estado.

Este puente colgante, estuvo en  uso hasta que  a finales de la administración del presidente Policarpo Bonilla se inauguró el nuevo puente hecho de calicanto.

El Puente de Calicanto

El semanario danlidense “El Piloto” que dirigía el maestro Pedro Nufio, en su entrega del 17 de marzo de 1900 informaba: “Tenemos el gusto de ofrecer a nuestros lectores la vista del útil y hermoso viaducto que hizo construir el doctor Bonilla, en el último año de su administración
Antiguo puente de Potrerillos
sobre el río Choluteca y a inmediaciones de Potrerillos, fue objeto de estudio y meditación el punto más convenido para colocar el puente, a fin de que las grandes avenidas del Choluteca no impidieran durante la estación lluviosa la comunicación entre Danlí, Yuscarán y Costa del Pacífico. 

Siguiendo las indicaciones de las personas más ilustradas del departamento fue levantado en el lugar que ellos indicaron, donde además de llenar las condiciones apuntadas atrás, ofrecen además de tener su base sobre rocas sólidas de basalto negro fuera del agua en la estación seca, no corre el peligro de sufrir choques con los grandes árboles que arrastran las corrientes, pues éstas son reducidas a pequeños fragmentos al pasar por una estructura, que presenta el río como unos 100 metros rio arriba del puente. La importante obra de que nos ocupamos fue construida de granito, material muy resistente que abunda en aquellos alrededores y ejecutado con bastante esmero por el contratista señor Jorge Hill, obra que fue entregada en el último año de la administración del doctor Policarpo Bonilla.
La Gaceta Oficial del 10 de febrero de 1899 resume el discurso del presidente saliente Don Policarpo Bonilla, en este informa que en el ramo de fomento y obras públicas se han terminado  varios puentes entre ellos el del paso de Potrerillos entre Yuscarán y Danlí.
Para 1899 existía en las instalaciones de este puente una oficina telegráfica para uso de sus transeúntes, como mencionamos en el artículo de Telecomunicaciones de esta Revista.

Con la construcción de la actual carretera de oriente, que se trazó por el lado del paso del Guayabo, el puente de Potrerillos quedó relegado a poco uso y los minerales Potrerillos y Yuscarán destinados prácticamente al aislamiento en cuanto al desarrollo comercial de la zona oriental.

La historia de Honduras registra sus días más trágicos comprendidos entre el 25 de octubre al 1 de noviembre de 1998, cuando se desató la furia del huracán Mitch dejando un saldo de destrucción y muerte en todo el territorio nacional.

Al fin las embravecidas aguas del Choluteca, derribaron el puente que hacía una centuria se había construido, como símbolo de progreso para la zona oriental y que mucha utilidad prodigó en aquella lejana época.

Fuentes: Diario La Tribuna del 10 de julio 2011, Diario Oficial La Gaceta,  Actas Municipales y del Gobernador del Circulo de Yuscarán del  Archivo Casa Fortín.