miércoles, 28 de agosto de 2013

Don Thomas R. Lombard y la minería en Yuscarán

Thomas R. Lombard
Thomas R. Lombard a pesar de sus responsabilidades como superintendente de la Rosario Mining Company, inició actividades mineras independientes. Después de ocho meses de haber llegado a Honduras Lombard le solicitó a Soto que le otorgara título a seis de las más famosas minas coloniales localizadas en Yuscarán: Comunidad, Guayabillas, Sacramento, Santa Cruz, San Miguel y Flores. La concesión otorgada a Lombard le otorgaba propiedad provisional de las seis minas y sus accesorios por el período de dos años. El título permanente a las minas dependía de que organizara por lo menos una compañía y empezara la explotación de una de sus minas. Soto también le concedió los mismos privilegios impositivos “otorgados a la New York and Honduras Rosario Mining Company”

En septiembre de 1882, Lombard fundó la Yuscarán Mining Company con un capital nominal de $5,000,000 para operar la mina Comunidad. Lombard convenció a Soto de que Honduras necesitaba una “organización sistemática” en la forma de “un sindicato de caballeros americanos, con el principal objetivo de abrir los distritos mineros” Lombard pronto formó el Central American Syndicate con el presidente Soto como Presidente y Lombard como el Representante Hondureño. Fusionó su Yuscaran Mining Company bajo este Sindicato y se preparó para empresas aún mayores.


Mina de Guayabillas, año 1887
Ilustración del Libro de don
Thomas R. Lombard
Alrededor de mediados de 1883, Lombard obtuvo una concesión sumamente extraordinaria, aún para los niveles hondureños. Lombard recibió permiso para establecer “molinos” a gran escala para procesar minerales en los departamentos de Tegucigalpa, El Paraíso y Choluteca. Se le otorgó además un monopolio por quince años para procesar todos los metales producidos por empresas mineras que no contaran con facilidades para procesar sus propios minerales.  Esta disposición de haberse implementado, hubiera eliminado todos los molinos procesadores que no fueran del Sindicato. También, las compañías formadas por Lombard para implementar las concesiones otorgadas iban a disfrutar de la acostumbrada exención de impuestos. Lombard podía  reclamar todas las minas descubiertas por los agentes de las compañías procesadoras y de reducción que él formara. Además, Lombard podía reclamar cinco minas abandonadas en los departamentos antes descritos. Finalmente, las compañías tenían la prerrogativa de exigir cualquier tierra que pudiera ser necesitada para la construcción de los molinos. Cualquier otra persona e intereses estaban estrictamente prohibidos para procesar minerales en estos tres departamentos.


Los detalles de esta concesión han sido mencionados en detalles para mostrar la magnitud de la empresa proyectada por Lombard y la generosidad de la administración Soto, lógicamente con intereses propios en estas.


Soto fue obligado a renunciar a principios de 1883. En 1885 el Congreso se retractó y declaró nulos todos los contratos negociados por el Dr. Soto en New Yok. Los diputados tomaron esta acción debido a que las compañías habían fallado en sus obligaciones contractuales, pero la acción tiene todas las características de un ataque personal al ex presidente por la administración que le sustituyó de don Luis Bográn y el nuevo congreso.

Compañías Mineras de Yuscarán de este período

Además de estas compañías se crearon en Yuscarán las siguientes compañías mineras:
-The Yuscarán Manufacturing Company, of New York, 5 minas, con un capital de $5,000.000
-The Honduras Manufacturing Company, of New York, 5 minas, con un capital de $1,250,000
-Santa Elena Manufacturing Company, of New York, 7 minas, con un capital de $1,500,000
-The Gibraltar Manufacturing Company, of New York , 3 minas, con un capital de $1,000,000
-The Paraíso Reduction Company, of New York cuenta con un capital de $500,000; 
-Sindicate Company, of New York, con un capital de $26,000

Don Thomas Roussell Lombard, publicó el libro “The New Honduras: Its situation recurses, oportunities, and prospects” publicado en Chicago en 1887. En este libro se incluyen las interesantes ilustraciones de minas e ingenios de Yuscarán que hemos incluido en varias revistas. En las próximas ediciones de esta revista les incluiremos las narraciones que sobre Yuscarán hace don Thomas R. Lombard en su libro.

Publicado en la Revista "Yuscaran, Ayer y Hoy" Número 7 Mayo de 2013




 

Un repunte de la minería en Yuscarán, años 1880 a 1890

Los mineros hondureños pudieron abandonar los primitivos métodos en el beneficio de la plata casi a finales del siglo XVI; por entonces fue introducido aquí el sistema de amalgación inventado en México por Bartolomé Medina,  insustituible, por lo que los reyes de España lo estancaron (restringir venta fiscal) para el beneficio de la Corona en 1559.


Pero al iniciarse el siglo XIX, la industria minera vino a menos; algunos suponen que este decaimiento se originó por la dificultad de conseguir el azogue (mercurio), que unas veces provenía de Almadén en España y otras de Guancavélica en el Perú y cuando se conseguía, los precios eran tan elevados que no daban el rendimiento apetecido; otras opiniones parecen revelar que la falta de braceros atajo el auge minero. A raíz de 1821, los propietarios de minas productivas cerraron sus operaciones; la inseguridad pública, la amenaza constante de las convulsiones internas y disputas internacionales mantuvieron en zozobra al inversionista y aunque la mina de por si es fuente de riqueza, esta no se produce si no hay una inversión que garantice el pago de los obreros, el mantenimiento de los planteles, el transporte del metal a los mercados y el rendimiento de ganancias que toda empresa comercial persigue. Por estas circunstancias solo quedaron beneficiando pequeñísimos filones, muy discretamente trabajados, los “gambusinos” y los “guirises” formando en realidad un patrimonio familiar de alguna monta, pero no una fuente de riqueza nacional.

Marco Aurelio Soto y la minería en Yuscarán

Fue el gobierno reformista del visionario Doctor Marco Aurelio Soto el que reabrió el capítulo minero en Honduras. Se ha acusado al Dr. Soto de haberse enriquecido con este renglón. Por razones bien conocidas el Gobierno tuvo que buscar en el extranjero el capitalista que estuviese interesado en invertir para explotar un renglón tan productivo como la minería. Pero no fue fácil encontrar esos capitalistas; el Gobierno se vio precisado a desplegar una campaña muy activa en los periódicos norteamericanos, especialmente en New York, anunciando los incentivos que estaba dispuesto a conceder al capital extranjero que invirtiera en esta empresa; Entre 1880 y 1900 Honduras experimento un auge minero de considerables dimensiones que rehízo su configuración económica dentro de un modelo similar al que había obtenido en el período colonial. El oro y la plata eclipsaron a la ganadería, al corte de maderas y temporalmente superó el cultivo del tabaco y los embarques de fruta. Gambusinos y mineros procedentes de los Estados Unidos y sus territorios especialmente los de Nevada, Colorado, Dakota y California, de  Inglaterra, Francia y aun Alemania recorrieron las faldas montañosas de la vertiente del Pacifico y las frías aguas auríferas de Olancho, cada quien buscando su Dorado.


Pantaleon Colllier, quien residía en Yuscarán, organizó una compañía accionista, denominada Sociedad Minera de Yuscarán, en marzo de 1878 “Debido a que la Ordenanza de la minería (el código minero que había retenido Honduras después de la Independencia) no incluía la capitalización corporativa. El presidente Soto emitió una dispensa especial bajo la cual esta compañía podía ser formada”  Este incidente probablemente atrajo la atención de Soto a los inconvenientes de las regulaciones hondureñas referentes a la minería y lo estimularon a buscar su reforma inmediata.

Don Alecio Fortin
Los accionistas de esta compañía incluían a muchos prominentes hondureños, Abelardo Zelaya era un comerciante hondureño, dueño de haciendas y magnate minero de primer orden, Daniel y Alecio, J. Camilo, Simón Fortín eran todos miembros de una familia de élite de Yuscarán. Daniel fue el Gobernador del Departamento de El Paraíso por muchos años, Mónico Córdova fue un destacado comerciante, Alcalde de Yuscarán y también Gobernador Político y el mismo Presidente Soto era el principal accionista.

La compañía solo tuvo un éxito moderado debido a que los accionistas nos pagaban sus cuotas en formar regular. Sin embargo, los directores declararon varios pequeños dividendos antes de que la compañía fuera legalmente disuelta en 1884.El 1º de enero de 1881 entró en vigencia el nuevo código minero que erradicó muchos obstáculos a la minería moderna que estaban inherentes en la vieja legislación española que contenía en las Ordenanzas de la Minería.

El Dr. Soto y su primo Enrique Gutiérrez, poseían la mina EL Rosario en San Juancito y en 1880 se incorporaron a estas varias familias medianamente ricas de New York que fueron tomando el control de la Compañía al adquirir la mayoría de las acciones. Soto otorgó a la compañía las siguientes exenciones por un periodo de 20 años o sea hasta 1900. 1) respecto al impuesto sobre maquinaria, equipo o materiales necesarios para las operaciones diarias de un campo minero; 2) impuesto de exportación sobre los minerales; 3) todos los impuestos municipales y nacionales de cualquier tipo. El 8 de diciembre de 1882 se extendieron estos beneficios a cualquier establecimiento minero “formal” que operara en el país. Además de exonerar a las compañías de cualquier tipo de impuestos, se acordó otorgables derechos de requisición de madera y agua. A su vez les imponía varias obligaciones; no podían vender los artículos sujetos a impuestos que importaran bajo la exención; tenían que construir bodegas seguras para el almacenamiento de pólvora; y tenían que registrar su compañía con el Gobernador Político cada cuatro meses.

Publicado en la Revista "Yuscaran, Ayer y Hoy" Numero 7 de mayo 2013



La minería colonial en Yuscarán

Tomado de la Guía Histórico - Turística de la ciudad de Yuscarán,
Por Rossibel Herrera, Sergio Antonio Palacios, Juan Manuel Aguilar, año 1993
*Se transcribe literalmente del español hablado en ese siglo

Aunque no se conoce una fecha exacta de las denuncias de las primeras minas en la localidad, deben haber sido posteriores a 1743. El Historiador Reina Valenzuela hace mención para 1744 de las ricas minas de Quemazones y Guayabillas en dicha jurisdicción. Además, agrega que Yuscarán a pesar de que se pobló con rapidez, los establecimientos de comercio existentes no estaban en capacidad de suplir las necesidades de los vecinos, por lo que tenían que aprovisionarse en el Real de Minas de Tegucigalpa, al igual que los mineros de San Antonio y Santa Lucía.

Como consecuencia de lo anterior, en 1764, los mineros de San José de Yuscarán expusieron a las autoridades correspondientes las penurias que pasaban para proveerse de carne, al punto  que los buscadores de vetas de metales preciosos tenían dificultades para contratar operarios de carpintería, herrería y albañilería para acondicionar las nuevas explotaciones. Tres años después los comerciantes de Yuscarán presentaron un recurso para que se permitiera vender toda clase de víveres, frutas y géneros en días festivos.

Francisco Nicolás de Busto y Bustamante, Alcalde Mayor de la provincia de Tegucigalpa en 1762, rindió informe detallado, entre otras cosas. Esta provincia comprende nueve reales de minas que se distinguen con los nombres de Santa Lucía, San Salvador, San Antonio, Cedros, Potrerillos, Yuscarán, Corpus y San Martín. En todos ellos solamente laboran 32 minas, según resulta de los autos de visitas que existen en el archivo de cabecera pues aunque pudiera excavarse muchos más, la falta de operarios priva a todos los intereses del tesoro.

La situación conflictiva se dio en Yuscarán  y también en otros centros mineros alrededor de los denuncios de minas. De esto resultaba que por tener la costumbre, en este mineral de Yuscarán de emprender trabajos, hacer catas y escarbaderos y abandonarlas ya por no encontrar suficiente, como por falta de medios y pide se les posesione de dicha mina, porque esos mismos que la comienzan a beneficiar, cuando ven que otros las continúan quieren embarazárselos o impedírselos pretendiendo derecho a ello

Ignacio Garzón minero y azoguero del Mineral de Yuscarán en 1767, relataba los problemas que enfrentaba la actividad extractiva y peticionaba abundantes sacas de plata, aumento de quintos reales y bien público, son absolutamente necesarios… que haiga buena administración de justicia… cuadrillas de ladrones entran a robar en las minas armados… derrivando los pilares, así me derribaron la mía… ordenanzas de minas como las de Nueva España y el Reino del Perú. Aparte de los problemas anteriores Garzón agregaba los de carácter económico…”Que se quiten los regatores del mineral que existen con el nombre de pulperos… que no revendan embarazando a los mineros a que compremos con la libertad para la mantención* de las gentes… que se prohíba a los mercaderes, trocadores de platas…. A que compren… azogue a personas que se sabe no la sacan por si por los infinitos robos que padecemos… que se nos de la pólvora a precio de costo…. Y que el material de la sal quede libre de la real alcábala…. Y dársenos los azogues a precio de 30 pesos. Por otra parte, también existen referencias sobre el saqueo de minas mientras sus propietarios se encontraban fuera de la localidad.

Mano de obra de las minas Los alcaldes de Tegucigalpa mantuvieron el problema de surtir a los Reales de Minas con mano de obra indígena, situación que se tornó cada vez más difícil con los nuevos descubrimientos auríferos. Por su ubicación geográfica Yuscarán y Potrerillos con relación a los otros centros mineros, tenían problemas referentes a repartimiento de indios para los trabajos de extracción. Consecuentemente, los mineros de Yuscarán y Potrerillos solicitaron a las autoridades de Guatemala les abasteciera de indígenas de Nueva Segovia, Nicaragua. Estas solicitudes fueron atendidas a partir de los primeros denuncios mineros “…. Los pueblos de Segovia distribuidos…. En los referidos minerales de Yuscarán y Potrerillos eran suficientes a sostener todas las labores… así como en tiempo del exmo. Don Joseph Vásquez Prego se mando de 25 de junio de 1752 acudir a dichas minas de Yuscarán con repartimientos de la Segovia que fue obedecida por aquellos alcaldes Ambos minerales con mucha dificultad fueron abastecidos de mano de obra indígena procedente de Texiguat, pero ya desde 1778 se hacía sentir la férrea rebeldía de los naturales por malos tratos. Situación que se volvió más precaria a finales del los 1700s cuando los mismo indios peticionaron no ser repartidos para los trabajos de las minas.

El gobernador Intendente de Comayagua, Ramón de Anguiano, en censo levantado en 1801, detalló la población de los pocos centros mineros aún existentes, observando sobre la extracción  “…  y como la decadencia presente es tan grande que ya esta concluido este único Patrimonio Real, que tiene vuestra Majestad…” Para solventar esta situación, Anguiano recomendaba establecer un banco que habilitara a los mineros y traer compañías de México a fin de dar a conocer la aplicación de los nuevos métodos extractivos.Las referencias que se tienen entre 1801 y  1821 sobre centros mineros no es halagüeña: “Las ricas minas de plata de Choluteca y Tegucigalpa, o se encontraban inundadas unas, agotadas otras, o produciendo muy poco las que quedaban por el ausentismo de mano de obra y por una mala administración al suprimirse la Alcaldía Mayor de Tegucigalpa e incorporarse a la Gobernación de Comayagua. Yuscarán como Real de minas no quedó exento a esta situación. La reglamentación minera colonial continuó vigente aún en el periodo independiente. También se emitieron disposiciones prohibiendo la vagancia y los juegos de azar en los centros mineros. 



Un radio publico en el Kiosco del parque el Progreso, año 1935

Por Oscar Wilfredo Lezama
Kioscoy parque de Yuscarán año 1916
Según acta municipal del 1 de abril de 1935 en su numeral # 7. El alcalde mociona para la compra de un radio P-Filco de 11 Tubos toda onda para amenizar el parque y población y como no tenían partida para ese gasto se pide autorización al consejo departamental para tomarlo de las partidas globales o que se haga una colecta de empleados y amigos del municipio.

En el acta del 20 de abril de mismo año: Dice que se exija la compra o negociación del radio y que para colectar los fondos o contribuciones se nombre tesorero o Don Manuel Andara y a don Federico Nolasco para el contrato o compra del aparato, al valor más económico que pueda y cuanto antes.

En Sesión de corporación del 15 de julio de 1935, el secretario informa de un telegrama remitido por Manuel Andara en que avisa que Don Carlos Izaguirre (El escritor y literato)  en nombre de la colonia de Yuscaranes obsequiara un radio al municipio, el que el traerá a su regreso de Comayagua.

En la sesión ordinaria del 1 de agosto de 1935, El alcalde comunica a la corporación que se a recibido conducido por el Coronel Manuel Andara un radio con sus baterías y anexos obsequiado por la colonia de Yuscaranes en Tegucigalpa y que debe hacerse el gasto de instalación. (Una caja armario para colocarlo en el Kiosko y postes para las antenas) comisionaron a Manuel Andara para tal obra. El radio se instalo en el kiosko y pusieron una persona encargada del mismo.

En acta del 1 de junio de 1936 Numeral # 6. El ministro de Gobernación dirige al acalde un mensaje manifestando que los Señores Leonidas Rodríguez y Rafael Ferrari, propietarios de la Radio H.R.N, desea transmitir una vez por semana un gran concierto de música selecta patrocinada por las municipalidades, donde se hará publicidad a las alcaldías por sus obras, y que las alcaldías que tienen radio presten su contingente o dichos señores. La alcaldía respondió que sus rentas no se lo permitían.

Para 1941 todavía estaba en funcionamiento el radio en el Kiosko del parque El Progreso.

Mejoras al Parque El Progreso


En 1962 el parque o Jardín EL Progreso sufrió muchas transformaciones, cambio la verja, arreglo de arriates, pavimentación de avenidas (calles) cambio de banquetas. Se eliminaron plantas, especialmente palmeras, según acta municipal # 21 del 16 de julio de 1962. El presidente Ramón Villeda Morales dono Lps. 1,000.00 y 100 bolsas de cemento para esa reconstrucción. 


Centenario de Yuscarán como cabecera, año 1969

Por Lic. Hector Ramón Cortés

Desfile del Centenario de Yuscarán como cabecera, 1969
Los preparativos iniciaron desde el mes de enero de ese año, las fuerzas vivas, autoridades civiles y militares se reunieron a convocatoria del Alcalde Municipal Don Arturo Cortes Urrutia. Se organizó un comité pro celebración del Centenario,  eligiendo como presidente a don Arturo Cortés y Secretario al Profesor Asdrúbal Carías, integrando la directiva diversas personalidades de Yuscarán. Así mismo se nombraron miembros honorarios de este comité a Yuscaranenses residentes en varias partes del país como el Profesor Carlos Federico Licona que ese tiempo vivía en el Barrio Buenos Aires de Tegucigalpa, al Sr. Ramón Héctor Mondragón Colindres presidente del Comité Departamental del Partido Nacional en ese año y al Sr. Humberto Ochoa Carías  que gustosamente aceptaron y se pusieron a disposición del comité. Igual invitación le fue girada al Dr. Alberto Guzmán B. jefe de la división de Tuberculosis del Ministerio de Salud quien se puso a las órdenes de dicho emprendimiento, entre otros.


En 1969 con ocasión de arribar a su primer centenario como cabecera departamental del departamento de El Paraíso, Yuscarán la sultana de Oriente, vistió sus mejores galas en una celebración que duro 6 días como se lo merece esta noble y culta ciudad.

Don Arturo Cortés Urrutia
Con el fin de recaudar fondos para dicha celebración, se solicitó la colaboración especial  a Don Luis Raudales M. residente en el Caracol para que prestara al comité el salón principal de la casa de su propiedad en esta ciudad para proyectar películas y realizar fiestas bailables, a lo que el Señor Raudales asintió gustosamente.
Para ese año ya existía una asociación de profesionales de Yuscarán residentes en Tegucigalpa que a petición del Sr. Alcalde se reunificaron y fortalecieron su asociación, dirigiendo diversas notas solicitando colaboraciones y especialmente se envió nota al presidente Oswaldo López Arellano para gestionar diversos proyectos que necesitaba Yuscarán en ese entonces, haciendo énfasis en el proyecto de alumbrado eléctrico que para ese tiempo tenía un valor de Lps. 20,000.00. En su misiva hacían eco del aporte en impuestos de la destilería el Buen Gusto que para ese tiempo era del 3% sobre ventas haciendo un monto de dos millones de lempiras, en ese tiempo propiedad de Doña María de Mondragón. La asociación de Profesionales de Yuscarán estaba dirigida por el Lic. Carlos Alberto Urrutia Raudales como presidente, Perito Mercantil Erasmo Suarez secretario General y El Licenciado René Corea Cortés como secretario de relaciones.


Los alcaldes municipales del departamento fueron convocados mediante circular número 27  de  mayo de 1969 firmada por el Sr. Alcalde Don Arturo Cortés Urrutia, así mismo al Sr.  Gobernador Político del departamento, Capitán de Infantería René Alaniz R. que anuentemente aceptó tal invitación.

Profesor Asdrubal Carias 

El día 28 se declaró feriado local incluso en las oficinas nacionales como el Juzgado de Letras seccional de Yuscarán dirigido por el Lic. José Antonio Rivas.

Ese año para Yuscarán fue memorable, con la dirección del Poeta y Periodista Eliseo Romero se logró compilar y editar la Monografía del Municipio de Yuscarán, una colección notable de historias, personajes y mucha información de la Sultana de Oriente en su primer centenario como cabecera departamental. Para esta edición  se contó con el apoyo decidido de don Humberto Ochoa Carías.


El día de la celebración llegó y esta se extendió desde el Martes 27 hasta el domingo 1 de junio, destacando la participación del Instituto Dr. Presentación Centeno dirigido por el entusiasta y recordado profesor Miguel Fiallos Tosta y la de la escuela Ramón Montoya C. que tuvieron a bien tomar un día completo para celebrar en un variado programa que comparto a continuación, literalmente como fue publicado.

Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy" Numero 7 de mayo 2013



Poeta y Narrador Guillermo Codrington

Por Lic. Hector Ramón Cortés
Su verdadero nombre es William James Codrington.
Nació en la ciudad de Yuscarán, El Paraíso el 4 de junio de 1931. 
 Sus padre fueron Juhan Codrington de origen Ingles capataz de una empresa minera y Maria Nuñez vecina de Yuscarán.

Poeta y narrador, vinculado a las Ediciones Pegaso, del  que fue director. Ganador de los Juegos Florales de San Marcos de Ocotepeque en 1985, asimismo de varios certámenes de poesía, cuento y ensayo.

Es conferencista de la Dirección de Historia Militar, donde labora como encargado de la biblioteca.

Portada de la Novela Krekantary

El laureado escritor ha recibido las preseas¨: “Lira de Oro” del Grupo Ideas, en poesía, “Lira de plata” del Grupo Ideas en la rama de cuento, “Lira de Plata” del Grupo Ideas en ensayo y el primer lugar en los Juegos Florales de Copán. En la actualidad es conferencista sobre temas de interés nacional en la Dirección  de Historia Militar y es  miembro de la sociedad Literaria de Honduras desde 1969.

Obras publicadas:
CUENTO:
Cuentos de Tierra y Viento (1983).

NOVELA:
Krekantary (1985),
El Muro del Silencio (1987),
Cero al Espacio (2003).
Visitantes del General Morazán

POESÍA: La Cosecha (1969).
Escribiéndole a Juan (s. f.).

ENSAYO:  El mundo de Lucila Godoy

Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy" Número 7 de mayo 2013



La Familia Colindres

Presidente de Honduras
Vicente Mejia Colindres
Por Lic. Hector Ramón Cortés

Es un gusto seguir proporcionándoles a nuestros conciudadanos la historia de las familias  oriundas de Yuscarán de cuyas entrañas nacieron ilustres presidentes de la República o Primeras Damas. Con la familia Colindres ya son cuatro las familias que hemos compartido: La familia Guardiola Arbizú, La Familia Morazán, La Familia Bográn y hoy la familia Colindres. Y nos restan cuatro familias presidenciales más.

La Familia Colindres es una de las familias que ha permanecido en Yuscarán desde su poblamiento en las primeras décadas de los 1700 hasta la actualidad, como se pude comprobar en los archivos parroquiales de esta ciudad. Del seno de esta familia han salido ciudadanos destacados, funcionarios municipales,  diplomáticos, ministros, poetas y  presidentes de la república.

A principios de los años 1800 se casaron en Yuscarán José Antonio Fortín y Doña Bernardina Guevara española, de este matrimonio nacen Simón, Antonio, Eusebio, Esteban, Ancelma, María Salome y Vicente. Como se puede observar en el censo de 1820 levantado por Don José Sotero Verde.

Años más tarde María Salome Fortín Guevara se casa con Pedro Antonio Colindres, de este matrimonio nacen Angel Marcial, José Daniel, José María, Ana Joaquina, María Manuela y Juana Evangelista todos Colindes Fortín.

Ana Joaquina nacida el 16 de julio de 1829 y Juana Evangelista nacida el 24 de  julio de 1840 en Yuscarán emigran hacia la Esperanza Intibuca aproximadamente a mediados de siglo.
Ya en la Esperanza Juana Colindres Fortín  se casa con Vicente Mejía Velásquez y de ese matrimonio nace en 1878  Vicente Mejía Colindres quien llega a ser el presidente número 37 en la historia de Honduras desde el 1 de febrero de 1929 hasta el 1 de febrero de 1933. Don Vicente Mejía Velásquez se casa por segunda vez con Lucia Nieto.


Ana Joaquina se casa en la ciudad de Comayagua con Paulino Nieto que fue ministro de Gobernación y Relaciones Exteriores de Honduras en el gobierno del presidente José Santos Guardiola.

Fuentes: Archivos Parroquiales de Yuscarán, Archivo Casa Fortín, y el  Censo del año 1820.
Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy" Número 7 del mes de junio 2013


lunes, 26 de agosto de 2013

Minero y Comerciante Don Santiago Moncada

Por Dina Cora Sánchez Irías
(Extracto)  Publicado en Diario La Tribuna el 28 de agosto de 2011

Don Santiago Moncada
Ganadero, comerciante, minero y político, nació en el mineral de San José de Yuscarán en 1835. Propietario de la mina El Zapote y El Machetero, dueño de la hacienda de Sabana Redonda y “El Chichicaste” en Jamastrán, Danlí. Tenía instalada su tienda de negocios frente a la plaza, costado noroeste de la iglesia parroquial. Calificado como capitalista de primera clase para todos los asuntos relacionados con empréstitos voluntarios y forzosos. Regidor y alcalde de Yuscarán. Socio comercial con Castulo, Alecio y Daniel Fortín en negocios de importaciones y habilitaciones mineras. Contribuyente en todas las actividades de fomento a la educación y el hospital de esa ciudad. Participó en la Convención de Santa Bárbara que organizó el Partido Nacional de Honduras. La muerte le sorprendió lejos de su querida patria y sus restos descansan en el cementerio general de la ciudad de Ocotal, Nicaragua. Cuando analizamos su trayectoria personal podemos concluir que Santiago Moncada fue verdaderamente un ciudadano emprendedor, con una iniciativa para los negocios fuera de serie.

Un hombre extraordinario. Casado con María Magdalena Jereda, originaria de Yuscarán, quien nació un 18 de enero de 1835 y su madrina de bautismo fue Raymunda Moncada. Hija natural de Concepción Moncada Flores (1811-1893) y Nieves Jereda. Sus abuelos paternos, Juan Miguel Moncada y Joaquina Flores. María Magdalena fue bisnieta de Juan Miguel Moncada y María del Rosario Ordóñez (hija de Juana Ordóñez) falleció en su ciudad natal, Yuscarán, un 26 de agosto de 1904.

Descendencia  de Santiago.  Santiago y Magdalena fueron padres de nueve hijos:

1. José María, su hijo mayor, no tuvo descendencia, y conforme a los datos censales falleció a una temprana edad.

2. Francisco Ramón, nació el 24 de agosto de 1859, siendo su padrino el conocido capitalista Daniel Fortín. Casado con Josefina Rodríguez (1873-1912). Fueron sus hijos: Carlos, Isabel, Ricardo, Mercedes y Félix Moncada Rodríguez. Electo Alcalde de Yuscarán para el año de 1900. Un día viernes 2 de febrero de 1917 entregó su alma al Señor.

3. Raquel de Jesús, nace el 20 de octubre de 1861; siendo su madrina de bautismo Teresa Leiva. Casada con el ciudadano alemán Otto Huske. Por las actividades profesionales de su esposo residió en Tehuantepec, México. Madre de Otto y Guillermo Huske Moncada. No se sabe cuándo muere, ni dónde están enterrados sus restos.


4. Margarita, conocida en nuestro mundo familiar como la “Tía Yita”, nació el 25 de junio de 1865. No tuvo descendencia y convivió con su sobrina Eva Cáceres Moncada, hija de su hermano Adán. Falleció en la ciudad de Danlí un día sábado 22 de febrero de 1941 en la residencia de su sobrino Porfirio Pérez Moncada.

5. María Magdalena, nació el 25 de junio de 1868 y falleció el 29 de diciembre de ese mismo año, a la tierna edad de seis meses.

6. Santiago nació alrededor de 1870. Casado con Teresa Rojas. Fue padre de José León (1896-1934), Justino (1909), José Ángel (1913-1935), María Marcos (1914-2005), Magdalena (1917), Isabel y Jesús. Su hija María Marcos Moncada Rojas, vivió casi toda su vida en el valle de Jamastrán en la aldea El Chichicaste. Santiago muere un 28 de diciembre de 1929 a las seis de la mañana en su casa de habitación, cita en la aldea de Sabana Redonda a la edad de cincuenta y ocho años.

7. Carlos Federico, nace alrededor de 1872, no sabemos cuando salió de Yuscarán, pero gran parte de su vida la vivió en Danlí y que allí se casó con Susana Castillo López (1878-1968), originaria de Estelí, Nicaragua. Son padres de Carlos (1912-1963) casado con María García (1930-1990) y sus hijos Carlos, Gloria que vive en Tegucigalpa, y Yolanda que reside en Los Ángeles, California. Haydee, falleció a la tierna edad de 23 meses, el 17 de julio de 1917 y sus restos están en Yuscarán. Francisco José (1916-2008), casado con Estela Valenzuela Ubeda (1916-1981).

8. León Leónidas, nació en la ciudad de Yuscarán en 1875.
No disponemos de datos de cuando emigró a León, Nicaragua. Casado con Joaquina Soto (1880-1961), hija de Rafael Soto y Fermina Somarraba. León Leónidas es padre de Rafael (1905-1980), Leónidas (1907) y Alicia Moncada Soto, quien nació el 5 de abril de 1910 y casada con el doctor y catedrático de la Universidad de León, Emilio Santiago Rubí (1903-1964). La descendencia Moncada Soto son: Emilio José, Martha Esmeralda, Juan Rafael, Roberto José, Claudio Agustín y Alicia María. Esta vivió durante algún tiempo en Danlí junto a su esposo Ramón Lovo Moncada, originario de Ocotal, Nicaragua. Falleció Alicia María Moncada Soto el 10 de agosto de 1999.

9. Adán Moncada Jereda, nace en Yuscarán el 4 de marzo de 1881. Realizó sus estudios de Bachillerato en el instituto del pueblo natal. Antes de viajar a la Universidad de León, Nicaragua, a realizar estudios de Medicina ya es padre de su primera hija Eva Cáceres con Mercedes Cáceres. Durante su permanencia en León fue padre de Porfirio Pérez, hijo de Obdulia Pérez. Al dejar sus estudios se traslada a vivir a la ciudad de Estelí, donde conoce a Juana Ancelma Irías Torres (1896-1977), originaria de Estelí e hija de Ignacio Irías y Andrea Torres. Producto de esa linda relación es Jorge Adán, quien nació el 22 de marzo de 1917 casado con Enma Esperanza Colindres Barahona. Adán Moncada Jereda, decide regresar a su país natal, pero no regresa a Yuscarán sino que se radica en el Valle de Jamastrán en la aldea El Chichicaste, propiedad que heredó de su padre. 

Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy", Número 6 de Mayo 2013


Escasez de Alimentos en el año 1862

Por Oscar Wilfredo Lezama

Han sido varias épocas  en Yuscarán en las que se ha sufrido escases de víveres, teniendo las autoridades que tomar medidas urgentes para suplir a la población, tal es el caso que hoy nos ocupa. Les comparto el acta Municipal que contiene las medidas tomadas para aliviar tal situación.


Yuscarán 28 de abril de 1862

CONSIDERANDO

Discutieron la escases o carestía de los frutos alimenticios que se experimenta en la población y se producen graves necesidades los habitantes y en singular la clase proletaria y que serán terribles las fatales consecuencias que resultara, desatendiendo el clamor de los sentimientos filantrópicos no  dicta medidas aliviarias sino suficientes a aliviar en el todo en parte ya que es de su inmediata incumbencia emitir diligentes providencias y ejecutarlas con energía hasta hacerlas efectivas.

ACUERDAN

1.
Que se solicite al Señor Cura por medio de Comisionados la plata que sea posible  y cambiarla se mande una comisión a la sierra  del Distrito del Corpus y sus adyacentes en solicitud  de maíz  y de mas frutos alimenticios para que se conduzcan a esta jurisdicción y se vendan a principal y costo proporcionalmente.

2.
Queja habiendo prestado el Señor Cura Angel José Andrada Carrasco  26 marcos  3 y media onzas de plata fina, se cambie a 8 pesos con cuatro centavos.


3.
Que debiendo dar causa de la garantía de la plata al señor Don Daniel Fortín se le hace especial hipoteca del producto del rastro facultando para que acopie los otros que produzca el rastro, referidos del 1 de marzo próximo hasta que regrese el capital invertido de que es fiador, el que ira recibiendo conforme se vaya realizando para de este modo tener asegurados la devolución del préstamo y que para socorrer y aliviar los exhaustos se comisiona al regidor cuarto.


Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy", Número 6 de Mayo 2013



La religión católica en Yuscaran - Segunda Parte


Iglesia de Yuscarán
Oleo por Hector R. Cortés
Por Oscar Wilfredo Lezama

No se conoce la fecha exacta de la fundación de la iglesia de Yuscarán pero se han encontrado evidencias de actividad religiosa antes de 1743.
En 1751 se solicitó la construcción de la iglesia y la permanencia de un capellán pagado con estipendios del vecindario.


Se cree que la iglesia se concluyó en 1768. Para 1765 la iglesia ya poseía gran cantidad de bienes en calidad de capellanías otorgadas por vecinos del mineral así como las cofradías de Nuestra Señora del Rosario y de las benditas animas, siendo mayordomos de esta última Joachin Villalobos, Pedro Ferrera y Luis de Cárcamo, estos hacían préstamos a los vecinos  mediante hipotecas de sus propiedades.

En enero de 1861 se incendió la iglesia siendo cura párroco el sacerdote Angel José Carrasco. Para la reconstrucción se pidió al Gobierno abolir el reclutamiento. El gobierno con fecha de 23 de febrero resolvió abolir el reclutamiento y de la ayuda que también le fue solicitada ofreció ayudar en todo menos con dinero en efectivo.

El 11 de marzo de 1861 la municipalidad decide que todas las contribuciones deben ser para la reconstrucción de la iglesia, prohibiendo las limosnas o contribuciones para otros fines.
26 marcos 3 ½ onzas de plata fina que bien limpia entregó el sacerdote de lo que iban produciendo las alhajas que se fundieron en el incendio de la iglesia, se cambio a 8 pesos con cuatro centavos.

El 9 de mayo de 1865 muere el cura Angel José Carrasco en Tegucigalpa, ante el suceso, la municipalidad ordenó iniciar las exequias funerarias y que con la prontitud del caso saliera una comisión al lugar donde murió y si lo encontraban insepulto trasladaran sus restos a Yuscarán. Se ordenó luto por 9 días y durante este tiempo se prohibió toda clase de diversión hasta en los domicilios sin permitirse bajo ningún pretexto, el irreverente que por desgracia infringiera este artículo se corregía con multa de 5 pesos y otros tantos días de reclusión.

Que se convoque a la Comarca a presentar su condolencia en el funeral a los que asistirá la misma Corporación y los notables con uniforme negro.

Acuerdo Diocesano Numero 1
Palacio Episcopal de Comayagua, 16 de noviembre de 1888
Por cuanto las 7 vicarias foráneas existentes no eran suficientes se acordó pasar a tener la misma  
división de la República, así la quinta vicaría le correspondió a EL Paraíso recayendo en Yuscarán como cabecera y se formaba con las parroquias de Yuscarán, Texiguat y Danlí.
El 4 de enero de  1879 se emitió  el decreto de secularización de los bienes eclesiásticos por lo que los cementerios pasaron a la custodia  de la municipalidad, por esto la iglesia dejó de percibir fondos de fabrica que se destinaban a reparar el templo y gastos para el culto, obtenidos por limosnas por enterramientos.

En el incendio del 3 de enero de 1861, se quemó la imagen de San Miguel Arcángel. Esta imagen fue traída a Yuscarán justo con las de Jesús, San José, San Juan, San Pedro y el Señor de la Columna en el año de 1805 siendo cura párroco Faustino Arriaga.

En 1876 se le compran al señor Víctor Mora cuatro campanas de valor de $ 250 (pesos).
En relación con el incendio de la iglesia el 3 de enero de 1861, se hizo una colecta así:
Teresa Serra Morazán                       ½ onza de oro                      8 pesos
Francisca Baca                                   3 onzas plata bruta              8 pesos
Josefa Purulera                                   1 Marco 1 onza escaza       9.4 reales
Clemencia Durón                                                                               50 pesos
Cura Angel Jose Carrasco                                                               50 pesos
Pascuala Moncada                                                                           4 pesos

Total 125 pesos 3 reales plata.
Antes cada año y para la celebración de la Fiesta Patronal se nombraban capitanas (mujeres de la feligresía) para todo lo concerniente a la celebración de la patrona.

Con esto se compró lo siguiente:
1. Un corte de casulla blanca (de brocato) con flores rosadas que son 4 ½ vara a $ 4 cada una.
2. Un corte de casulla blanca de brocato inferior 4 ½ varas a 3 pesos cada una.
3. Un corte de brocato rosado 4 ½ vras.
4. 8 ½ varas de brocato Blanco para una capa a 3 pesos y medio seis reales.
5.70 varas de golan amarillo a 5 reales la vara.
6. Una vara de brocato para velo del Baldoquin del santísimo.
7. Una manta para envolver géneros.

Antes cada año y para la celebración de la Fiesta Patronal se nombraban capitanas (mujeres de la feligresía) para todo lo concerniente a la celebración de la patrona.

Publicado en la Revista "Yuscarán, Ayer y Hoy", Número 6 de Mayo 2013